Estoy, ligada... a una cama ajena a una pasión sin sentido
a una historia con pliegues.
Me perdí en unos ojos fulgurantes y maduros,
quedé acuñada en un pecho amplio y perdida en una voz,
más allá de los sueños.
¡Sí! Lo único que me resta es devorarlo con un efímero amor,
tragarlo sin un objetivo determinado y
disfrutarlo como una fusión momentánea
de tiempo-espacio...
Sin remordimientos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario